Extraordinaria interpretación de Viggo
Mortensen, quien se ha puesto más de 20 k encima para meterse en el papel. Los
demás se quedan pequeños a su lado, aunque mantienen el tipo.
Basada en una historia real, que habla
nuevamente del arraigado racismo en EEUU. Lo critica con tono blando y decide
centrarse más en la caracterización de los dos protagonistas, antagónicos en un
principio, pero que acabarán desarrollando una gran amistad. Se opta por el
tono más dulce y se arrincona el drama.