Película correcta, sin riesgos, basada en una historia real, que nos descubre a un personaje enigmático y aparentemente inmisericorde, John Paul Getty Sr. (me recordaba "Ciudadano Kane", sin su brillantez y rupturismo). Siendo el director quien es, no ha escatimado en medios, pero le falta brío y continuidad. Los flashback son esquemáticos y algunos personajes un poco caricaturescos (el chico secuestrado y su propio secuestrador). Además, tiene otra peculiaridad que hará una rareza esta película: el personaje del patriarca Getty lo hizo otro actor, Kevin Spacey, que al ser denunciado por acoso sexual, y ya rodada la película, se volvieron a filmar todas sus escenas con otro actor, Christopher Plummer. Cuando él aparece, y lo hace con frecuencia, la película sube enteros.
Lo que opina Ana:
Lo que opina Ana:
Correcta narración del secuestro del nieto del magnate del petróleo Paul Getty, sus puntos fuertes la recreación de los años 70 y las
actuaciones de Plummer como el avaro abuelo del secuestrado y de Michelle
Williams como la madre coraje. La película llega al fin a las pantallas tras
haber decidido Ridley Scott cambiar al actor que encarna al abuelo Getty tras las acusaciones de acoso y abuso
recaídas sobre el anterior protagonista, Kevin Spacey.