domingo, 4 de marzo de 2018

The Florida Project de Sean Baker

Lo que opina Ana:
Una película con niños como protagonistas es siempre un riesgo, en esta ocasión la niña protagonista Brooklin Prince, muestra un talento que asegura el éxito desde el primer momento en que aparece en la pantalla; sus amigos no son tan buenos pero cumplen su función.
Es una película que nos habla de la pobreza, de los marginados, de ese EEUU plagado de outsiders, muchos de origen hispano, negros y algunos blancos, como la protagonista y su madre, una joven soltera, descarada, con un pasado turbio, pero que hace de su hija una luchadora, a la que hace creer que viven en un cuento de hadas. Malviven en un motel cercano a Disneyworld en Orlando, su vida nada tiene que ver con el de los ensueños mágicos que disfrutan los turistas que visitan el parque, pero la niña parece muy feliz en el caluroso verano de Florida, correteando a sus anchas y liderando a su pandilla de amigos. Una nueva familia de desclasados llega al motel, una de las niñas quedará pronto atrapada por los encantos de Moonee, la descarada y divertida protagonista. Pero el drama late detrás de la inocencia de los niños y acabará mostrando su cara más dura, la risa se convertirá en llanto, nos espera un final elegante para este cuento. 
Emilio. El mérito de esta película es poner la cámara a la altura de los ojos de los auténticos protagonistas, los niños, y especialmente de la niña Moonee (Brooklyn Prince), un prodigio de interpretación. Estás en vilo todo el rato porque viven en un estado de salvajismo y libertad que crees que puede ocurrirles cualquier cosa en cualquier momento. Pese a que en ese hotel se vive al límite de la supervivencia (al lado del mismísimo Disney de Orlando), todo es decoroso. No hay escenas de de degradación, pese a que para pagar el alquiler algunas personas tienen que recurrir a la prostitución. No hay apenas escenas crudas. Se vive como en una arcadia feliz, pero falsa, y al final llega la verdad. El orden social se impone y ese sueño acaba, pero lo hace con mucha elegancia, huyendo al único lugar posible, al centro de toda ensoñación, el castillo de Disneyland. Película curiosa, con una mirada original sobre este mundo.