A Javier Ocaña le parece mediocre, de gruesa puesta en escena, caricaturesca en el retrato de algunos personajes y cuya mayor virtud son las imágenes reales de la marcha filmadas por documentalistas de la época. A mi me parece una película necesaria que necesitaría más explicaciones, ser más didáctica. Saber más de la bomba del comienzo, de la situación del país, de los personajes que aparecen. Conocer para entender mejor. Pero, aparte de que sea clásica en la puesta en escena "biopic lineal al uso" (Roberto Piorno en la Guía), es un eslabón más en el conocimiento de la lucha contra la segregación racial, que comenzó con las películas sobre la esclavitud y que tuvo su peculiar aproximación en "El Mayordomo" (2013). Esta es mucho más contundente en la denuncia y ahí está su virtud. No cae en el panfleto insustancial y en ella vemos lo que fueron aquellos cercanos años. Conviene recordarlo y darlo a conocer a los que lo ignoran.
Lo que opina Ana:
Lo que opina Ana:
Otra vez una película necesaria, de
obligada visión para todos. Cinematográficamente no consigue alcanzar un gran vuelo, pero narra con
veracidad las heroicas jornadas vividas
en 1965 por la población negra del estado de Alabama en su lucha por acabar con
la segregación de una manera real, capitaneados por los principios de la no
violencia de Martin Luter King y sus
seguidores. No hay una análisis profundo de la situación, el presidente Johnson
queda en un mal lugar, se centra en la figura de Martin Luter King, de quien
subraya su capacidad oratoria, sus profundas creencias religiosas y su lucha
personal por no apartarse de sus principios, lo vemos como a un hombre, con
dudas, con miedos, sabiendo que un destino trágico puede estar acechándolo.