Titula Jordi Costa la crítica "El regreso de papá Brexit"; claro, se refiere a otros filmes como "Dunkerque", "Churchill" y"Su mejor historia". "Dunkerque" es mejor película, sin duda, pero esta es más contenida en lo del Brexit. "Dunkerque" sonrojaba ( y a los franceses les ofendía) y esta descubre el histrionismo (y la debilidad) de este personaje clave en la historia del siglo XX. La interpretación de Gary Oldman está demasiado acentuada, igual que, en general, los subrayados dramáticos (la música). Una película como esta tiene la obligación de ser fiel a la historia, y debe ser tan cierta la hostilidad a Churchill de su propio partido (Chamberlain y Halifax) como su viaje en metro para conocer el latido del pueblo (ahí si está lo genuinamente inglés, pero es, en esas circunstancias, comprensible). Se puede inventar el papel de la secretaria, pero no la visita privada del rey. Como visión histórica es interesante, como película entretenida y poco más.
Lo que opina Ana:
Lo que opina Ana:
Otra película que en la era del
Brexit, exalta sin matices la heroicidad británica durante la II Guerra
Mundial, como ocurrió con“Dunkerque”, gran película, aunque históricamente
escorada hasta el sonrojo. En este caso no llega a tal extremo, pero sí se
vuelve patriotera al presentar a un pueblo británico decidido a no transigir ante el opresor.
La escena de Churchill bajando al
metro y recorriendo una parada hacia Westminster, resulta grandilocuente. En
ese corto trayecto, es capaz de conectar con todos los pasajeros que le
muestran su gratitud por exigirles sangre, sudor y lágrimas, afirmándose enfervorecidamente
dispuestos a verter todos esos líquidos y excreciones en pro de la libertad.
Es también excesiva en la composición
del personaje, la cámara lo escudriña y persigue metiéndose literalmente en su
cara; sus discursos resultan agotadores, entre las bocanadas de humo de sus
habanos y los lingotazos de alcohol. Cansa un poco, hay que esforzarse por
seguirla.