sábado, 21 de octubre de 2017

El último traje. Dir. Pablo Solarz

La historia es interesante y seguramente posible. Un judío argentino de origen polaco regresa a sus orígenes a encontrarse con la persona que muchos años antes le salvó la vida en plena barbarie nazi. El problema es su desarrollo, con un protagonista sobreactuado y unos encuentros inverosímiles, cada uno más imposible que el anterior. Se alarga demasiado la película y hay partes que no sólo sobran, sino que distorsionan y ridiculizan el significado principal (casi todo lo que protagoniza Ángela Molina, por ejemplo). El rodaje ha debido ser caro: muchos actores, muchos escenarios de países diferentes.
Lo que opina Ana:
Se trataría de un buen cuento, si hubiera estado bien contado. Es una pena que se le escape el relato, que rechine a cada paso, que no nos haga aceptar como espectadores los códigos del cuento. El actor principal, Miguel Ángel Solá, está sobreactuado, Ángela Molina se convierte en un esperpento y así todos los personajes que aparecen en este largo viaje.