viernes, 7 de octubre de 2016

Neruda. Dir. Pablo Larraín

Neruda no es una película para todos los públicos, tampoco lo era "El club". Es un cine que pide al espectador una visión no pasiva. Metrópolis le da cinco estrellas, lo máximo. Es posible. Neruda está cargada de literatura, de imágenes poderosas, de planos y contraplanos, de narraciones paralelas y confluyentes en torno a la omnipresente figura de Pablo Neruda, nada mitificado pero aupado a una dimensión que no nos figurábamos desde España. En Chile,en esos años finales de los cuarenta, es casi un dios, báquico y mundano, popular y temido por ello. Sin ser el argumento central, la dimensión política siempre está presente. Él es, sea a su manera, un comunista. Cine interesante. Es un privilegio poder verlo.
Lo que opina Ana:
Película de minorías, cuidada en cada una de sus tomas y estructurada jugando con la realidad, mezclando literatura e historia .

Tomando como base la persecución del senador comunista Pablo Neruda al comienzo de la Guerra Fría, en un Chile reacio a la expansión de los ideales comunistas, se fabula una especie de thriller en el que el policía encargado de su captura, el narrador de la historia, baila entre dos aguas, a veces parece querer ser real, como lo son la mayoría de los otros personajes, y a veces se desvanece en medio de su cuerpo literario, para acabar convertido en un irreal espectro, en una ensoñación literaria.