
Ya en el "Concierto" se le iba la mano bastante, echando sal gorda a la historia de esa orquesta soviética de prejubilados, que lucha por dar el concierto de su vida. Pero tenía algún punto de humor. En esta pasa lo mismo, pero sin ese punto, salvo contadas excepciones. La película ha recibido el premio, el primero que se concede, a favor de la igualdad de géneros, pero las buenas intenciones no hacen buenas películas, y en este caso se cumple a rajatabla. Te parece artificial desde el primer momento, desde cuando la cámara sigue el recorrido de las mujeres camino de la fuente. Hay bastante folclorismo con encuadres turísticos de pueblo con encanto, y los papeles, sobre todo los masculinos, son como marionetas. Queda la belleza de la protagonista, Leila Bekhti.
Lo que opina Ana:
Desgraciadamente el mejor epíteto para esta película es MALA. Malo es su guión, mala es su planificación, pueril su modo de relatar la historia, parece que el director creyera que con juntar a unos cuantos actores de moda y darle un tinte etnográfico a la historia, ya se consigue una buena película, pero no es así, sólo vemos folclore del malo.