martes, 8 de abril de 2008

Love and Honor


Otra historia de samuráis. Todo lo espectacular del cine del chino Zhang Yimou, lo tiene de discreto esta película de Yoji Yamada. Los guerreros de "La maldición de la Flor Doroda" se mueven en grandes coreografías y suntuosos palacios y ricas vestimentas. Aquí es la pulcritud teresiana de los carmelitas descalzos.


El verano pasado, en julio, vimos otra película de samuráis, se llamaba "Hana", del director japonés HiroKazu Kore-Eda. Lo que está en el trasfondo de ambas películas, de todo el género podíamos decir, es el honor y la venganza que muchas veces requiere el mantenerlo. Pero mientras aquélla era cansina por lo enrevesado de la trama, ésta es muy sencilla: el amor de un matrimonio se pone a prueba en un ambiente sin pretensiones, vulgar. La felicidad se rompe y hay que recomponerla bajo unas difíciles condicones. No hay estridencias en este drama, que está muy bien interpretado por el samurái y su mujer. Incluso cuando la acción debe ser protagonista y el samurái lucha en un duelo en el que al comenzar se despide de su vida, se hace de una manera un tanto rústica, como si se tratara de dos pobres que, sin perder las formas, luchan por una cuestión de honor.


Me parece bien que termine bien, aunque sea más comercial. Sin hacer nada extraordinario nos ha contado con gusto una historia de amor.
Lo que opina Ana:
Cadenciosa y bella película japonesa, bella por sus imágenes, su argumento, su lenguaje cinematográfico. Viajamos hacia un pasado feudal de señores y vasallos para deleitarnos con una historia de amor que es un cuento poético que va madurando en contenido y poesía con un ritmo pausado, que te permite recrearte en todo ese ambiente ya desaparecido de un tiempo sin prisas, cercano a la naturaleza y en el que, sin embargo,las pasiones y los sentimientos básicos de los seres humanos seguían siendo tan similares a los actuales.