viernes, 15 de diciembre de 2017

Coco. Dir. Lee Urnkrich yAdrián Molina

No es "Del revés". Llegar a esa cota otra vez le va a ser muy difícil a Pixar. Pero es una película muy decente, un poco tontorrona a veces. Tiene una animación marca de la casa, sobresaliente en sus escenarios y ambientes: la ciudad de los muertos y el puente que cruza al mundo de los vivos son espectaculares. Hay también un humor reconocible en las historias de Pixar y una cosa nueva para mi, rescatar una costumbre cultural y espiritual no estadounidense, y hacerlo con respeto, sin reconvertirla a lo yankee: el culto a los muertos en México. Lleva implícito el mensaje de que el recuerdo mantiene vivos a nuestros antepasados. Me gusta que de vez en cuando los personajes suelten alguna palabra o frase en español. Miguel, el protagonista, diria, no sean chingados y vayan a verla.
Lo que opina Ana:
Delicioso tributo a los que se han ido. Pixar rinde también tributo a México y sus tradiciones en un momento en que el presidente Trump trata de levantar muros. Disfruté enormemente con ese viaje mágico de la noche de los muertos. Emilio decía que no tiene la hondura de “Inside out”, que es una obra menor, más infantil. Sin embargo, a mí me llega profundamente, me emociona  y me hace pasar un rato estupendo. Me gusta mucho el respeto que muestra, ese juego con el inglés y el español que convierte la película en mestiza. Nada más llegar a casa cambio la foto de perfil de whatsapp para demostrar que creo en la máxima defendida en la película de que nuestros muertos viven mientras continúen siendo recordados.