domingo, 5 de febrero de 2017

Toni Erdmann. Dirª Maren Ade

La comedia europea del año, afirman algunos. Bueno, comedia a ratos, y el humor es más bien grotesco y con un toque surrealista, ligado a un personaje que está entre un payaso de circo de pueblo y un humorista de un programa de televisión (malo). ¿Será así el humor alemán? Es una película larga, de la que no sabes muy bien qué decir. Tiene algunas escenas jocosas y parece que de fondo están las relaciones entre padres e hijos, la competitividad empresarial y laboral, la deslocalización y los ajustes de plantilla. Desde luego la directora Maren Ade ha sido valiente y decidida para sacar adelante una película tan rara.
Lo que opina Ana:
Llega a las salas aclamada por la crítica como la película europea del año. No es una película fácil, juega con las apariencias que ya sabemos pueden ser engañosas. Así  tras una aparente comedia surrealista, se esconde una profunda reflexión sobre las relaciones humanas, la economía de la deslocalización, la familia, los valores, las relaciones laborales, la batalla de los sexos en el mundo empresarial, el papel asignado a cada uno en esta sociedad  postindustrial.

Hay que dejarse llevar, aceptar su toque surrealista y la carga de fondo que presenta.