Está teniendo buenas críticas. Me gusta sobre todo la carga política, la desenvoltura que representa el hermano filósofo, ocasionalmente político. Esa parte, en sus sucesivos encuentros, en su desenfadado deambular, en su crítica a los políticos posibilistas, a la izquierda que ha perdido el arrojo de defender la utopía, que no ofrece esperanzas, solo cifras, lemas vacíos, sin poesía iluminada. Este personaje llamado Giovanni Ernani en la película nos muestra lo que vale la ilusión, aunque sea pasajera y en la arena de la playa se pierdan sus últimos pasos.
El otro hermano, Enrico, el político, cuando vuelve la vista atrás y huye, lo vemos en otra casa, en otro ambiente, en otra etapa de su vida que ya fue, ya pasó, aunque él quiera agarrarse a ella ahora otra vez. Me parece esta parte más forzada, más artificial.
Y el final (perdón por equivocarme y entrar cuando terminaba la sesión anterior) no sé lo que significa. No creo que sea lo que he leído en alguna crítica, relacionado con la bipolaridad. Si fuera así no se entendería lo anterior.
Lo que opina Ana:
Lo que opina Ana:
Extraordinaria interpretación de Toni
Servillo, él es la película. Una mirada crítica a nuestra realidad política, a
la farsa establecida, al alejamiento de los políticos de la realidad. Esa parte
es la que tiene más consistencia, la película no llega, en cambio, a cerrarse
como un círculo perfecto en su parte exterior, la que se centra en presentarnos
el pasado a través de la figura de la antigua novia de los hermanos gemelos,
ahí se vuelve forzada.