jueves, 12 de septiembre de 2013

Mud. Dir. Jeff Nichols

Ha tenido buenas críticas este director. Ya pasó con "Take Shelter" y ahora también. A mi no me termina de gustar, tal vez porque no llegue a entender del todo sus propuestas.
Esta película, ambientada en la geografía única del Mississippi, con las casas de madera sobre el agua y la vida particular de sus pobladores, gozando de la libertad que proporciona una naturaleza tan apabullante, no es tan extrema en su presentación de la vegetación y de la gente como "Bestias del sur salvaje", pero está bien reflejada. En este universo se presenta una historia muy bien narrada de un huido y dos chicos, que saltándose sus miedos y en secreto ayudan, por diferentes motivos, a este personaje. Es lo que tiene de eco de Mark Twain.
El género femenino está fuera de este código de vida. Los hombres y los chicos no las entienden, las temen. Las tres mujeres que aparecen, una madre y dos novias, van a dejar a sus parejas. Son poco fiables en un mundo de lealtades.
Es una película entretenida, de aventuras. Hay dos "cosillas": el papel de Reese Witherspoon como novia de Mud, el protagonista, es un poco simplón. Desencadena todo, sin que el personaje tenga la entidad ni le den el papel suficiente. Y el final, con dos corte de metraje más lo habría dejado abierto, como convenía a la historia.
La actuación de los dos chicos, imprescindible para mantener en pie todo el relato.
Lo que opina Ana:
Un cuento  que habla de la iniciación a la vida adulta, una película de aventuras en la que el paisaje del río Mississippi se convierte en un protagonista más. Es una pena que se le escapen algunos cabos en un relato que de no haber sido así, sería perfecto.
Los dos chicos protagonistas te cautivan desde su primer plano en la pantalla, los personajes que representan crecen y ellos les dan alas. El personaje de Mud, interpretado por Matthew MCConaughey es el imán de la historia, se deja ver a ráfagas, siempre ocultando cosas, amparándose en falsas verdades, aunque actuando como un héroe cuando le corresponde hacerlo. Su final y el del film deberían haberse quedado refugiados en esas sombras que le perseguían, no me gusta que se vuelva tan explícito, ni que una música festiva remarque el happy end.

Sam Shepard protagoniza a un secundario muy bien construido, su personaje es otro de los aciertos de la película.