Una película que dura casi 100 minutos y que termina con una frase que dice, aproximadamente, "métela otra vez que se ha salido", daría qué pensar sobre el genero al que pertenece. Pues obtuvo el León de Plata en Venecia y la copa Volpi al mejor actor; Javier Ocaña escribe que su director es el mejor desde hace década y media y en Metrópoli le dan 5 estrellas. Yo no sé qué quiere decir la película, puedo mal que bien hacer una sinopsis, pero el significado de todo lo narrado e incluso de sus partes se me escapa. Reconozco la perfección de los encuadres, de las ambientaciones, reconozco que Joaquín Phoenix en su papel de Freddie Quell hace de hombre atormentado con dedicación completa y obsesiva, hasta en el andar muestra su desequilibrio, pero, ¿todo lo que vemos conduce a confrontar un espíritu innoble con otro refinado y poderoso, el del personaje de Philip Seymour Hoffman? No lo sé, porque también está lo que llaman "La Causa", que me cuesta trabajo entender. Tenían razón unas señoras al salir: !qué película tan rara¡ decían (sin querer serlo, añadiría yo).
Lo que opina Ana:
Imágenes poderosísimas, interpretaciones prodigiosas, perfecta recreación de la época, pero un guión errático que hace que no sepas muy bien qué te están contando; da la sensación de fragmentación. Tenía la sensación de estar ante muchos relatos pequeños, me gustaban esas historias separadas y me perdía en la gran historia común.
Lo que opina Ana:
Imágenes poderosísimas, interpretaciones prodigiosas, perfecta recreación de la época, pero un guión errático que hace que no sepas muy bien qué te están contando; da la sensación de fragmentación. Tenía la sensación de estar ante muchos relatos pequeños, me gustaban esas historias separadas y me perdía en la gran historia común.