El erizo

Lo que opina Ana:
Pretenciosa y fallida. Lo único agradable era escuchar su dulce francés, casi recitado, bastante comprensible. El aire mágico aburre y no consigue su objetivo, los personajes no son creíbles ni atractivos y se nota demasiado el origen literario del guión.

Emilio Me comentaba una buena lectora, Eva, que la novela tiene mayor profundidad, que era otra cosa. La película tiene un punto de vista forzado desde el principio en la narradora, tan joven y tan superior, tan repelente si la tomas al pie de la letra, tan sola en su sumo bienestar y psicosis general. Que la "concierge" sea una erudita y guarde una biblioteca secreta que supera la de todos sus vecinos, y los de toda la manzana si me apuras, pues extraña, y que un japonés al primer golpe de vista, en el primer diálogo "todas las familias felices son iguales y cada familia infeliz lo es a su manera" descubra ese tesoro, pues también causa sorpresa. Pero a mi no me pareció mal, la vi sin más. Tal vez sea un poco brusco el final, como predestinado y tampoco favorece la distancia con la que se narran las cosas. Cualquier comparación con Amelie es tontería.

Un tipo serio

Lo que opina Ana:
Los hermanos Coen recuperan su infancia recreando el ambiente de una comunidad judía en una ciudad del Medio Oeste americano en los años 60. Todo es invención, desde la magnífica fábula en blanco y negro con la que arranca la película, hasta el triste cúmulo de desgracias que persiguen al protagonista.
Se nota que saben de lo que hablan y que están recuperando con ironía retazos de un mundo perdido. Hay muchas referencias culturales que no conocemos, pero uno disfruta con esta divertida sátira.
Los directores apostaron acertadamente por trabajar con actores desconocidos y el resultado es estupendo.

Emilio No pasará al catálogo de las obras maestras de los Coen, pero es una película de los Coen. Empieza con una narración corta a modo de signo premonitorio, de designio de Javé, pero después confiesan los directores que se inventaron el cuento y que no tiene que ver con la historia de la película, y te dejan descolocado.

Es una de judios que a los gentiles nos sirve para comprobar cómo el alma atormentada de un judio tiene que ser expuesta en la comunidad y pasar por el despacho de varios rabinos. Al pobre Larry se le están pidiendo muchos sacrificios y a su mente matemática le cuesta comprender las vueltas que da la vida. Cuando sales del cine te preguntas, ¿qué querían decirnos estos dos hermanos? No encuentras respuesta.

Avatar

Tal vez se le esté pidiendo a Avatar más de los que el director había pensado hacer "Yo quería crear un tipo de aventura corriente en un ambiente poco corriente".

Si leemos la hoja informativa de los cines Yelmo nos daremos cuenta de los complejos engranajes técnicos que tiene la película, por eso tal vez arrase sobre todo entre los jóvenes, porque es una tecnología que reconocen y valoran. Dicen que hay un 60% de imágenes generadas por ordenador, de ellas para mí las mejores, aparte de las trepidantes del comienzo, cuando Jacksully se pierde en la noche de Pandora, son las del aprendizaje junto a Neytiri en ese paraíso. Es el paraíso primigenio. Sin embargo, las escenas bélicas son, a pesar de su espectacularidad, vulgares, sobre todo el cuerpo a cuerpo final. Podríamos pedirle más, por ejemplo, que la duplicidad de la conciencia de los humanos que se transforman en avatar tuviera más complejidad, como la Alice de Lewis Carrol, que al atravesar el espejo entra en un mundo confuso y extraño; o también, incluso, que la comunión de los Na'vi con la naturaleza fuera como la consumación de la hipótesis de Gaia, llevada a sus extremos. O si se quiere, haber sido más ambicioso al denunciar al capitalismo global. Todo esto podía estar más desarrollado, con la pretensión de perdurar en el mensaje. No es así, pero tampoco es un horror. Claro que los que escriben cosas como que "el rey del mundo lo ha vuelto (por el director) a hacer: la película de acción más apabullante de la década", también andan un poco sobrados (de entusiasmo).

Lo que opina Ana:

Gran superproducción que ha batido todos los récords de taquilla, con unos efectos especiales y una técnica irreprochable, pero que en ningún momento llega a conmover. La historia es muy manida y simple, los malos son malísimos y los buenos capaces de vencer a Goliat pero sin alcanzar en su narración la épica que le habría realmante otorgado otra dimensión a la película, evitando el efecto de "déjà vu" entre Pocahontas y Rambo.

Donde viven los monstruos

Críticas dispares dentro del mismo grupo. On Madrid "una maravilla". EP3 de los viernes "milagrosa adaptación". Carlos Boyero "me aburro bastante".

No creo que sea para niños, pero habría que probar qué sienten los de nueve o diez años al ver a Max huir de su casa, en la que vive bastante bien y parece tener un ambiente para nada infernal ( el que una hermana mayor te crea un renacuajo estúpido es normal). En su huida llega a la isla de los monstruos (no quiero plantearme si es una referencia filosófica imaginaria o no). En esta isla adquiere el protagonismo que todo humano pretende, sea niño, joven, maduro o anciano. Desde ese momento lo que más me interesa es el universo de esos monstruos tan peculiares y tan caprichosos, tan humanos en definitiva. El final es un poco soso, sobre todo la última toma antes de llegar a la pantalla en negro. Entonces me quedo en un punto intermedio de los comentarios del principio.

Lo que opina Ana:

Lo mejor de esta película son las voces de los monstruos en versión original, lo demás se esfuma tan pronto como sales de verla.

Mal día para pescar

En un momento creí que tendríamos el cine para nosotros solos, luego llegamos a la media docena, más o menos.

Me gusta más este título que el del cuento de Onetti "Jacob y el otro", pero no sé si hubiera sido capaz el directo de hacer una película como esta sin la ayuda inestimable del universo de Onetti.

La narración fílmica es valiente y decidida, y como dice Javier Ocaña (El País, 11, dic., 2009) con "una puesta en escena elegantísima". Y unos personajes que no son unos monigotes, arquetipos, sino que respiran y responden a los estímulos. Dicen que es un western sin pistolas, a veces tiene algo de cine negro en esas figuras de dos perdedores que buscan el último aliento que les rescate del olvido y les anime la vida. Buena película.

Lo que opina Ana:

Un cuento hecho película de la mano de Álvaro Brechner. Consigue el director recrear con acierto el espíritu de estos perdedores, desarrollando el guión con un tono melancólico y guardándose siempre un as en la manga para no perder nunca la capacidad de sorprender al espectador. Está muy bien contada y recreada y permanece con su toque especial acabado el metraje, creciendo incluso ya fuera de la sala de cine.

In the loop

Una de las comedias más brillantes del año, escribía Jordi Costa (El País, 4 de diciembre, 2009). Una crítica feroz a la guerra de Irak, a la alianza de Bush y Blair (Aznar no aparece citado para nada). Te aclara más la hoja informativa de los cines Verdi "In the loop es cine británico cien por cien". Por eso, tal vez, me parece un poco simplona, debajo de tantísima palabrería, tacos a mogollón incluidos (a los que era muy aficionado el Director de Comunicación y Estrategia de Tony Blair, un tal Alastair Campbell, interpretado por Peter Capaldi). La trama parece un poco ridícula, cuesta trabajo creer que esa guerra se decidiera así, todo tan burdo. Y lo de comedia, y lo de brillante, bueno...Vale.

Lo que opina Ana:

Llegó a Madrid precedida por excelentes críticas y muy premiada en la gala del cine británico. Es una parodia antibélica en la que me pierdo entre las palabrotas que brotan sin cesar de la boca de alguno de sus personajes. Quizá sea que los subtítluos resultan crípticos pero yo no entré en ella, casi no me reí, por tanto conmigo funcionó.

Buscando a Eric

No le cojo últimamente el tranquillo a Ken Loach. Javier Ocaña escribía "una regocijante comedia dramática de aire social". Mejor me parece el comentario del propio director "Es una película contra el individualismo; se es más fuerte en grupo que solos". Ese grupo lo forman los hooligans del Manchester, muchos de ellos carteros. Esa parte está bien, un poco desmesurado lo del autobús contra la banda de matones. Pero donde la película se va al garete en en la historia familiar del pobre cartero Eric Bishop (Steve Evets). Lo de los hijos que pasan de ser usurpadores okupas, guarros y groseros, a unos hijos adorables que buscan la felicidad de su padre, no se puede aguantar. Vale si son licencias para llevar el buen mensaje que tiene la película. Por cierto, Cantona no lo hace mal, aunque lo suyo, está claro, era el fútbol.

La ventana

Dice Carlos Sorín, el director, que con la Ventana quería hacer un plagio inconsciente del clásico de Ingmar Bergman "Fresas Salvajes". Puede ser, de forma remota, pero cada una tiene su esencia. La de Sorín tiene más plenitud de comunión con la naturaleza y el espacio, ese caserón en medio del campo como protagonista pasivo.

Película lenta con pocos sobresaltos, pero placentera. Bien desarrollada y contada, que comienza y termina con el sueño infantil de un hombre mayor en vísperas de su muerte, sueño de un baile para mayores y una institutriz, cuyo rostro va aclarándose segun se acerca el protagonista al final de su vida.

Lo que opina Ana:

Una buena película para acabar el año, pocas palabras, un guión guiado por la luz, las miradas, el transcurrir del último día de un viejo moribundo. No esconde su constante tributo a "Fresas salvajes" de Bergman. Ahora en color, en la lejana Pampa argentina, un anciano inicia su último día con un sueño que le transporta a un episodio de su niñez, como si lo estuviera viniendo a buscar para siempre.

Está llena de sentimientos, el espectador también mira a través de esa metafórica ventana que sirve para conectar el mundo real y vivo, con el de la muerte acechante.

Garbo, el espia

Es un milagro que proyecten esta película en cines comerciales (los Verdi, en Madrid) y que se haya hecho este documental sobre un español, Juan Pujol García, que fue una pieza importantísima en el mundo del espionaje y del contraespionaje durante la 2ª Guerra Mundial.

Es verdad que el documental no emplea mucho tiempo en explicaciones, no sabemos quienes son los especialistas que se ponen delante de la cámara, se supone que historiadores. La narración se adentra en la época y sobre todo en el personaje como si ya tuviéramos un conocimiento previo. Llegados aquí sólo hay que dejarse llevar por las imágnes, siempre interesantes y por el original empleo de fragmentos de películas, y por lo que Javier Ocaña (El País, 4 de diciembre, 2009) llama el "precioso diseño sonoro y musical". Interesante.