Se pregunta Diego Salgado en la Guía del Ocio si a otro director se le disculparía lo retrógrado y conformista que desde el punto de vista socio-histórico evidencian las imágenes. Y tiene razón. Es raro que a una mujer le pueda gustar esta película por el papel que ocupan en ella. No es de extrañar que a mis hijas les pareciera literalmente "una mierda pinchada en un palo" y "una bazofia", respectivamente. Sin embargo, en Metrópoli (tres estrellas) considera Alberto Bermejo que sería negativo interpretar la película como una de tantas comedias gamberras de iniciación universitaria.
Yo fui a ver lo que hacía, cómo montaba esta recreación del ambiente universitario de los años ochenta, olvidándome hasta donde era posible de lo corto, simple, bruto, machista y burdo del ambiente que refleja. Me esperaba lo que vi, por eso no salí quemado, y como director, Linklater saber hacer las cosas.
Lo que opina Ana:
Lo que opina Ana:
La crítica del Mundo la había puesto
muy bien, diciendo que lo único malo que podía encontrarle es que la gente sólo
viera en ella una más de las típicas películas de novatadas y gamberradas en la
universidad. Pues eso es lo que yo encontré. Si este es el reflejo de la
universidad americana de los 80, es para salir corriendo, machismo,
encefalogramas planos y poco más.