domingo, 8 de febrero de 2009

la duda


Una apuesta sobre seguro, dos papeles principales, un duo interpretativo de altura, pero una baja intensidad dramática, un argumento muy simple, un planteamiento muy esquemático. Todo puede ser por proceder la película del teatro y por tener el director sobre todo experiencia en ese campo. De hecho esta es su segunda película, la primera la realizó dieciocho años antes. Meryl Streep en su papel de monja intransigente es la absoluta dominadora, porque Phillip Seymour Hoffman, en el de cura abierto y cercano, está como maniatado, medroso. El papel intermedio de la joven monja, que representa Amy Adams no puede equilibrar el duelo, aunque el director la ha querido colocar en un punto equidistante. Todo bascula hacia Meryl Streep. Y al final, la trama se hace más endeble, cuando más tenía que ganar. Ni la acusación de abuso sexual ante la propia madre del chico tiene la fuerza y dramatismo que se merecía, ni la duda de la severa Streep es creible, a esas alturas y pasado lo que ha pasado.
Lo que opina Ana:
Previsible, no consigue que el espectador se interese excesivamente en su trama. Correctamente filmada, bien interpretada, esto es lo que la sostiene, si no fuera por sus interpretaciones no se mantendría en pie. Quiere acercarse a un drama y lo hace sin brío, no sirve ni como denuncia pues las posiciones quedan dudosas, como el título de la película.