Una película histórica danesa, rodada en Praga y Dresde y con numerosos escenarios reproducidos digitalmente.
Es correcta, bien ambientada, pero al mensaje histórico final: la lucha entre el oscurantismo del Antiguo Régimen y la Luces de la Ilustración en la Dinamarca de la 2ª mitad del siglo XVIII, le perjudica el trasunto amoroso y las bajezas de la gran política, aunque sea revolucionaria para su tiempo.
El amor adúltero entre la reina Matilde Carolina y Struensee, el médico personal del rey danés Christian VII, desplaza el foco de la historia, la monopoliza, aunque no sea obsesiva su presencia. Y el personaje del médico, el motor de las reformas, más bien parece un novato al que el azar y las circunstancias han colocado en un puesto y en una situación que le supera. Es sintomático que su valoración tenga que hacerse postmortem, cuando se habla de la obra llevada a cabo por el rey sucesor, el hijo de Christian VII.
De todas maneras, se ve bien y es interesante descubrir esa parte de la Ilustración en un país lejano como Dinamarca.
Lo que opina Ana:
Cuidada ambientación para reproducir con exactitud la atmósfera cortesana danesa en los tiempos cercanos al estallido de la Revolución Francesa. Se narra una historia verdadera, desconocida para los que vivimos tan al sur, que nos lleva a una Europa anclada en los privilegios, en la desigualdad y contra la que se levantan las voces de los intelectuales más preclaros, quienes acabarán por incendiar la llama revolucionaria en un mundo en plena transformación. Película, pues, de género, bien documentada, realista, que se convierte en un trampolín hacia el pasado, para observarlo con mirada atenta y crítica, al tiempo que para recrear una bella e imposible historia de amor.
Lo que opina Ana:
Cuidada ambientación para reproducir con exactitud la atmósfera cortesana danesa en los tiempos cercanos al estallido de la Revolución Francesa. Se narra una historia verdadera, desconocida para los que vivimos tan al sur, que nos lleva a una Europa anclada en los privilegios, en la desigualdad y contra la que se levantan las voces de los intelectuales más preclaros, quienes acabarán por incendiar la llama revolucionaria en un mundo en plena transformación. Película, pues, de género, bien documentada, realista, que se convierte en un trampolín hacia el pasado, para observarlo con mirada atenta y crítica, al tiempo que para recrear una bella e imposible historia de amor.